De una entrevista que Punset hacía al neurólogo Robert Sapolsky narrada en su libro El viaje a la felicidad extraigo una frase del neurólogo que me llamó mucho la atención:
“La capacidad de conmoverse por hechos que ocurren lejos es característica del ser humano”. Puede ser que se trate de una compensación natural a la capacidad del ser humano de destrozar las vidas de otros congéneres (y entornos) que están muy lejos (y con lejos se refería tanto en el espacio como en el tiempo), pero en cualquier caso creo que es una característica que, sobre todo en tiempos de crisis, preferimos no emplear demasiado. Por eso la cooperación al desarrollo como política pública es un cuento que ni los propios políticos se creen…