>
De momento están estos dos ejemplos franceses que me llamaron la atención, de temas agropecuarios y de agua, que no es habitual ver en las iglesias españolas (creo que en España aun queda bastante camino para la difusión del mensaje de la cooperación religiosa, que a veces parece bastante anclado en el DOMUND y los niños con huchas para dar dinero para los «negritos» con los dibujos de colores que pintábamos cuando éramos pequeños, salvando honrosas excepciones que apenas consiguen hacerse notar dentro del propio ámbito católico).
Ella cultiva vuestra donación. Poster en una iglesia francesa, con carácter aun bastante asistencialista.
>Es cierto que en España tenemos el concepto de que para hacer cooperación religiosa, hace falta meterse en alguna orden. De hecho, no debe ser sólo en España, porque a Paola hace algunas semanas le tuve que explicar que uno puede ser misionero y seglar a la vez…Pero por otra parte, la gente joven que no abandona demasiado pronto (o incluso, bastantes de los que sí abandonan la Iglesia), se suelen enganchar en actividades de voluntariado social, que acaban siendo un paso intermedio hacia la cooperación, sea religiosa o no. Al final, lo importante, es que alguien haga el trabajo bien (o como decimos los católicos, que ayudemos a traer el Reino de Dios ;-)), sea con motivaciones religiosas o no.Por cierto, yo nací el día del DOMUND ¿se nota? 😀